Pasamos dos noches en La Casa Dels Ocells y todo fue increíble. Gabriel es un anfitrión excepcional, la habitación estaba impecable y bien decorada. Los desayunos caseros eran deliciosos y disfrutar de la cena bajo las estrellas fue mágico. Sin duda, volveremos!

El desayuno con jugo de naranja recién exprimido fue fantástico.

Tuve problemas para encontrar la casa, ya que el GPS no era confiable. Además, el acceso a la habitación no fue muy intuitivo, lo que complicó mi entrada y salida. Aunque la limpieza fue correcta, esperábamos una experiencia más fluida en general.

Disfruté de una habitación con balcón que ofrecía vistas impresionantes. La limpieza y la decoración eran impecables, creando un ambiente acogedor. Además, los desayunos caseros preparados por Gabriel, como los croissants calientes, eran un verdadero deleite para comenzar el día.

Dificultad para llegar.

La atención y los desayunos frescos son excepcionales.

La habitación con balcón ofrecía vistas impresionantes y una decoración acogedora. Disfruté de la limpieza impecable y de la atención del personal, que hizo que me sintiera como en casa. Sin embargo, el GPS para llegar fue un desafío, y mi estancia, aunque increíble, fue demasiado corta. La mantequilla de cacahuete en el desayuno fue un toque genial que disfruté mucho.

El lugar perfecto para desconectar

Pasamos 2 noches y la verdad, fue genial. La habitación tenía un balcón espectacular con vistas a las colinas. El desayuno, con croissants calientes y embutidos, estuvo excelente. Nos sentimos como en casa. Eso sí, el GPS para llegar fue un poco loco, pero eso no opacó la experiencia. 100% recomendable.

la casa es un sueño, el balcón tenía vistas brutales a las colinas. gabriel, el anfitrión, súper atento y nos dio tips geniales de lugares para ver. el desayuno con croissants calientes y omelets frescos estuvo on fire. la decoración es un vibe acogedor y modernete, todo limpísimo. realmente, te sientes como en casa, 10/10.

el gps se volvió loco al llegar y me quedé con ganas de más días.

Tener que irme fue lo peor. la habitación con balcón era increíble.

Pasé tres noches en un lugar donde todo estaba en perfecto estado. Las habitaciones tenían todos los detalles que necesitaba y la comida preparada por Gabriel fue sorprendente. Disfruté de la atención y los consejos sobre lugares para visitar. Me sentí cómodo desde el primer momento. Me encantó terminar el día con una cena casera, donde cada plato ofrecía un sabor diferente.

No poder quedarme más días.

Un lugar de ensueño. Todo impoluto, con una decoración acogedora. La habitación tenía un balcón y vistas preciosas. Disfrutamos de cada rincón y un ambiente súper relajante.

El GPS se volvió loco! Pero al menos no nos perdimos en el camino.

De verdad que lo aconsejo para unos días

Acogedor espacio, acogedor personal, donde disfrutamos de la limpieza impecable de la habitación y de la deliciosa comida casera que nos preparó el anfitrión, además de poder conectarnos fácilmente al wi-fi durante nuestra estancia.

Todo estuvo perfecto